Padre Nuestro

.“…vuestro Padre sabe lo que os hace falta antes que lo pidáis”.

      Jesús se detiene un poco en el tema de la oración. Nos dice, no sólo que hay que orar, sino cómo tenemos que orar. Y nos ofrece la oración del Padrenuestro. 

     Nunca reflexionaremos suficientemente sobre esta oración, que es como el prototipo de la oración. Hoy podemos detenernos en estas palabras anteriores, que son como la introducción al Padrenuestro: “vuestro Padre sabe lo que os hace falta antes que lo pidáis”. 

    La oración no es un recordatorio a Dios, si se ha olvidado de nuestra necesidades. El Padre conoce todas esas peticiones que hacemos en el Padrenuestro: “danos hoy nuestro pan”, “perdona nuestras ofensas”, “líbranos del mal”…y otras peticiones que solemos hacer, más allá del Padrenuestro. 

    Jesús invita a no abundar en palabras, en aquello que el Padre ya conoce. 

    Si pedimos es, más bien, para tomar conciencia de nuestra necesidad, para reconocer que solos no podemos, para crecer en humildad y en la necesidad de que el Padre actúe en nuestra vida. 

   Rezar bien el Padrenuestro nos ayuda a situarnos bien como hijos, necesitados de Dios. Y cuando uno va creciendo como hijo de Dios, va creciendo en humildad, en confianza, en amor hacia el Padre, le van sobrando palabras.